Reinterpretación de una famosa secuencia del cine mudo de Buster Keaton de los años 20 en la que la fachada de una casa cae sobre el propio Steve McQueen, quien resulta ileso porque está de pie justo en el hueco que deja una ventana. El director británico exhibió su obra en un “loop” continuo, repitiendo el mismo momento, rodado desde diferentes ángulos, durante cuatro minutos, en el Museo de Arte Moderno de San Francisco (SFMOMA) durante los años 1999-2000.